Hoy pensé mucho en los niños que fueron alumnos míos en mi primera experiencia como profe titular, en el colegio Lindavista. Entré cuando ellos iniciaban la secu y los acompañé en todo ese viaje, me fui cuando ellos terminaron tercero.
De verdad fue lindo conocerlos y, sin quererlo, convertirme en una parte de sus vidas. Ahora son casi adultos ¡carajis! están en universidad y así... es muy raro encontrarme con eso, me da gusto saber de ellos y sobre todo, darme cuenta de que me estiman y en algún momento les ayudé, los apoyé o sólo les di confianza.
También influye el hecho de que a la par del viaje que ellos comenzaban, yo inicié otro; el ejercicio profesional. Por eso nos enamoramos mutuamente.
A mis niños del Lindavista les doy desde aquí un gigante abrazo y...
qué cursi estoy hoy.
1 comentario:
¿y qué hay de tus ex-alumnitas del cona? también tenemos nuestro corazoncito.
Además tu me enseñaste las reglas de acentuación y ahora soy fan de los acentos!!!
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